De acuerdo con los alarmantes datos de Monitoring of the Andean Amazon Project – MAAP, la minería aurífera ilegal ha retornado en zonas degradadas de La Pampa. Este lugar se ubica dentro de la Zona de Amortiguamiento de la Reserva Nacional de Tambopata, Madre de Dios. Allí se ha incrementado en más del 400 % las infraestructuras mineras respecto al 2021, luego de la denominada “Operación Mercurio” (2019), cuyos resultados se vieron frustrados debido a la pandemia que imposibilitó trabajos de campo y seguimiento a la actividad minera en pozas residuales. Así, en 2021, se identificaron 148 dragas remanentes en espacios degradados, mientras que, en el 2023, se han encontrado 598. Este hallazgo demuestra el retorno peligroso de la minería ilegal en la zona de La Pampa.

Por otro lado, es importante recordar que uno de los principales impactos que deja la minería ilegal, además de áreas deforestadas, es la generación de pozas residuales donde se concentran sedimentos removidos del suelo y elementos contaminantes utilizados durante la extracción del oro. En ese sentido, se aprecia que, en el año 2021, la gran mayoría de pozas se encontraban inactivas; sin embargo, en el año 2023, la mayoría de estas pasaron a ser pozas activas, incrementándose en un 320 % en tan solo dos años.

Desde Red Muqui, condenamos rotundamente la minería ilegal que, además de generar un impacto negativo sobre el ambiente, conlleva la violación de derechos humanos conexos, vulnera aún más los ecosistemas frágiles y refuerza el despojo y destrucción de los territorios, con grave daño a la vida de las comunidades y población en general.

Fuente: Asociación para la Conservación de la Cuenca Amazónica

Crédito de la foto principal: El Comercio

La población del distrito de Llata, provincia de Huamalíes, en Huánuco, acató, el viernes último, un paro masivo de 24 horas contra la empresa minera Antamina, en demanda por incumplimiento de una serie de compromisos suscritos en mesa de diálogo con las comunidades.

Se trata de acuerdos pactados hace 6 años como el asfaltado de la carretera Antamina – Llata – Tingo Chico, construcción de instituciones educativas y un hospital, entre otros proyectos bajo la modalidad de Obras por Impuestos. Según la ciudadanía movilizada, a la fecha no se ha cumplido con la entrega del expediente técnico de dicha obra de asfaltado de doble vía. Por el momento, la carretera es un peligro para la seguridad vial.

“No es posible que Antamina que se lleva minerales de este territorio peruano, y tiene tanta riqueza, no sea capaz de elaborar un expediente técnico, tal como se ha comprometido con Provias Nacional a través de un convenio suscrito en el año 2016”, declaró uno de los dirigentes en radio Llata.

Al no tener respuesta oportuna de la minera ni de la Presidencia del Consejo de Ministros, decenas de personas llegaron hasta el campamento minero Yanacancha. Un grupo ingresó al lugar, volviéndose un momento tenso y crítico en el que se lamenta probables heridos aún no reportados. La Policía Nacional del Perú habría realizado disparos y lanzado bombas lacrimógenas. En las redes sociales circulan fotografías de dos hombres con presuntas heridas de perdigones, aunque hasta el momento las autoridades no han confirmado este hecho.

PERUMIN

Tras la presencia de un fuerte contingente policial, representantes de la empresa minera plantearon a la ciudadanía movilizada reunirse en noviembre próximo para abordar sus demandas; sin embargo, la población solicitó que la fecha sea entre el 10 y 15 de octubre por tratarse de temas importantes para el desarrollo y el bienestar social, no únicamente la construcción de la carretera.

Más tarde, con presencia del fiscal, ambas partes firmaron un acta, en el cual se fija para el próximo 15 de noviembre el desarrollo de una reunión de la mesa de diálogo, fecha donde Antamina deberá entregar el segundo entregable del expediente del proyecto de la carretera. También en el documento se establecen otros acuerdos. Firmaron el Frente de Defensa de los Intereses de Llata, representantes de la empresa y de la población.

Días antes de concretarse el paro preventivo, en la convención minera Perumin, el presidente y CEO de Antamina, Víctor Gobitz, declaró que posiblemente pronto tendría la aprobación de la Modificación del Estudio de Impacto Ambiental (MEIA) por parte del Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles (Senace) y la aceptación de las comunidades para ampliar la vida útil de sus operaciones mineras al 2036.

Crédito de la foto: Radio Llata

El Proyecto de Ley N° 3634, Ley de Minería Artesanal y a Pequeña Escala, presentado por Jorge Luis Flores Ancachi del partido Acción Popular, actualmente se encuentra en la Comisión de Energía y Minas. El contenido de la propuesta legislativa demuestra claras intenciones de fomento y promoción de la minería artesanal y a pequeña escala, lo cual implicaría un grave riesgo por la falta de mecanismos de ordenamiento territorial y Zonificación Ecológica Económica (ZEE). Muestra de ello son los territorios de los pueblos indígenas u originarios que se ven gravemente afectados por el avance de las actividades ilegales e informales, tal como la minería ilegal, que representa un movimiento de más de 1 millón de onzas de oro al año, sin identificación de la trazabilidad de esta. Y sin mencionar los graves daños ambientales que viene generando esta actividad en los territorios andinos y amazónicos.

Se evidencia que, desde el 2002, se ha prorrogado múltiples veces el proceso de formalización minera integral, cuya acción solo ha desatado argucias legales para enmascarar la minería ilegal a través de la informalidad, inscribiéndose en el Registro Integral de Formalización Minera (REINFO). De esta manera, los mineros -en vías de formalización- aún tendrían plazo hasta el 31 de diciembre de 2024 para presentar sus instrumentos ambientales y permisos requeridos para la extracción de minerales. Por lo tanto, desde Red Muqui consideramos que las operaciones mineras, cual sea su magnitud, no deberán colisionar con los derechos humanos, el medio ambiente y el consentimiento de las comunidades campesinas y nativas bajo ninguna condición.

En ese sentido, desde el Grupo de Trabajo sobre Minería Artesanal y a Pequeña Escala de la Red Muqui (Grupo MAPE) se presentaron observaciones legales a la comisión dictaminadora, con el objetivo de cuestionar y aportar recomendaciones al proyecto de ley, así como solicitar su archivo inmediato debido al incentivo de la minería ilegal que generaría su eventual aprobación.

Para leer las observaciones legales, aquí.


Crédito de la foto: Tiempo minero

Este lunes más de 200 agricultores de Valle de Tambo arribaron en micros y buses a la ciudad de Arequipa, a pesar del hostigamiento policial que los paró y revisó varias veces durante el viaje, para expresar su rechazo al proyecto minero Tía María en la convención empresarial minero Perumin, que iba a visitar la presidenta Dina Boluarte, lo que finalmente no hizo después que organizaciones sociales anunciaran l protestas.

Durante el desarrollo del primer día de la convención, que se extiende del 25 al 29 de septiembre, el ministro de Energía y Minas, Óscar Vera Gargurevich, expresó que el gobierno desea la realización del proyecto minero :“Tía María es un proyecto muy importante para el país. Los deseos son que se realice, ya que genera mucho trabajo e inversión. Pero de hecho eso tiene que ir acorde con el pueblo que es el dueño del terreno, quien debe coordinar y dar el pase a eso”. El desarrollo en cuestión actualmente se encuentra paralizado, a pesar de que Southern Perú, compañía propietaria de la concesión, en estos años ha instalado obstáculos viales en varias zonas del área del proyecto minero, como denunció recientemente Red Muqui en un reportaje de dos partes.

Las declaraciones del ministro Vera aumentó la indignación de agricultores y organizaciones sociales de Arequipa que se movilizaron pacíficamente por la ciudad hasta llegar cerca del lugar de la convención. Manifestación que realizaron, a pesar de la criminalización del Estado, que tiene en prisión a tres ex dirigentes: Jaime de la Cruz, Jesús Cornejo y José Julio Gutierrez. El Ministerio Público incluso insiste en la denuncia por terrorismo contra el dirigente de la ciudad de Arequipa, Jorge del Carpio, que fue uno de los dirigentes que firmó la convocatoriaal paro contra Dina Boluarte en enero pasado.

Sin embargo, ayer martes, el premier Otárola declaró en la misma convención que el proyecto Tía María no está en agenda del gobierno y no se encuentra en la lista de proyectos prioritarios. Minutos antes había expresado en el mismo lugar que: “No vamos a permitir que el país caiga en el caos, desorden e inseguridad. El gobierno de Boluarte, ustedes todos lo saben, asumió un gran reto y como lo dijo la propia Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el gobierno controló más de 500 manifestaciones violentas, marchas que pretendieron soliviantar el Estado constitucional y legal de derecho, y les quiero decir en esta Convención que no nos temblará la mano para seguir haciéndolo en defensa de los derechos fundamentales y en defensa de la paz y tranquilidad de los 33 millones de peruanos. Quién diga que el Perú no es un país minero, está haciendo demagogia, la minería es esencial para el desarrollo de nuestro país”.

Para el abogado defensor de varios dirigentes criminalizados de Valle de Tambo, David Velasco, el gobierno ha retrocedido porque no quiere arriesgar abrir otro flanco frente al escenario de conflictos que ya enfrenta y debido a las legítimas protestas de los agricultores del valle.

Recuento

En los últimos días ha circulado en las redes sociales, el acta de compromiso que firmó Dina Boluarte en campaña electoral junto a Pedro Castillo, en el que se comprometían a no impulsar el proyecto Tía María. Acta que el dirigente Miguel Meza les hizo llegar en esa oportunidad en la zona, como recuerda el dirigente. Meza también califica de falso el supuesto apoyo de las autoridades locales al proyecto minero, como lo manifestó el ministro de Energía y Minas.

El gobernador regional de Arequipa, Rohel Sánchez, por su parte expresó: “En el caso específico de Tía María, hemos sido claros. Mientras no solucionemos el problema del agua en la provincia de Islay, no se pueden abordar esos temas”.

Continúa criminalización del Estado

En fecha tan reciente como el 21 de septiembre, el actual vocero del Valle de Tambo, Miguel Meza, recibió una notificación del Ministerio Público para asistir a una audiencia virtual, al igual que otros dirigentes, por haber llamado a manifestarse el 25 de septiembre frente a Perumin. A la cual tanto Miguel Meza como los demás dirigentes no acudieron. Dos días más tarde recibieron una exhortación del Ministerio Público, en la que se les conmina a no protestar ni generar disturbios, ya que de lo contrario serían denunciados.

El abogado David Velasco, asesor legal de los dirigentes, señaló que el Estado continúa con su estrategia de criminalizar a los agricultores de valle de Tambo a través del Ministerio Público, pre juzgando acciones de los agricultores en su legítimo derecho a la protesta, amparado en la Constitución.

Además, agregó que respecto de los dos dirigentes detenidos este año: Jaime de la Cruz y Jesús Cornejo, hasta ahora el relator de la Corte Suprema no ha atendido las llamadas telefónicas para agendar una cita respecto a la queja que presentaron por la ilegal e injusta detención de ambos agricultores. Además el Ministerio Público elevó la reparación civil que deben pagar, a una suma de entre 3 y 4 millones de soles.

“La queja primero fue presentada en febrero del 2022, en abril del presente año fue elevada a la Corte Suprema; luego la corte de Arequipa envió en agosto la documentación que faltaba para que la Corte Suprema tenga mayores elementos en su decisión y hasta ahora no resuelven”.

Frente a esta situación: “presentaremos por escrito la solicitud para que el relator agende una fecha directamente con la Corte Suprema, ya que no nos contestan el teléfono desde noviembre del año pasado”, precisó Velasco de la institución de Fedepaz, miembro de la Red Muqui.

El vocero actual del valle de Tambo, Miguel Meza, declaró que a pesar de la criminalización que sufren, seguirán realizando acciones para que el proyecto minero se archive para siempre. “La visita que hicimos al campamento minero hace más de un mes en que constatamos que Southern ha puesto garitas y tranqueras, de manera ilegal al parecer, la solicitud de información al MINEM sobre el estado actual del proyecto minero y las protestas que hemos desarrollado, han generado que el gobierno retroceda ahora”. Poco después de la visita de campo realizada a fines del mes pasado, efectivamente el MINEM respondió a través del siguiente oficio:

Ante los anuncios del régimen de Boluarte, su ministro de Energía y Minas, Oscar Vera, el premier Alberto Otarola y, los representantes de la empresa Southern Perú Copper Corporation que se han pronunciado a favor de la viabilidad del proyecto minero Tía María, en el Valle de Tambo, en el marco de la 36 edición de la convención PERUMIN en Arequipa, es importante señalar lo siguiente:

Es absolutamente irresponsable que el gobierno y la empresa minera busquen retomar el proyecto minero Tía María, conociendo que la población local del Valle de Tambo ya rechazó el proyecto a través de una consulta vecinal (donde el 97% de la población le dijo no a la minería) porque consideran que afectará, de manera irreversible, un valle fértil. Además, resulta inviable ambiental, económica y socialmente. Las declaraciones que hacen estos funcionarios en PERUMIN 2023 contribuyen a azuzar, aún más, la posible reactivación de un conflicto socioambiental en la zona.

El 14 de marzo del 2021 los candidatos a la presidencia y vicepresidencia Pedro Castillo y Dina Boluarte firmaron un acuerdo con la población del Valle de Tambo, en el cual se comprometieron a defender la agricultura y el agua en la zona, así como refrendar el retiro inmediato de la empresa minera Southern Perú de la provincia de Islay. Además, ambos candidatos acordaron la cancelación definitiva de todo denuncio minero (para hacerse de la concesión de proyectos mineros abandonados) en la provincia, para garantizar el desarrollo del agro, el turismo y la agroexportación, en un compromiso que declara la intangibilidad del valle.

La población de este fértil territorio se ha decidido por el desarrollo de la actividad agrícola, principal actividad económica en la zona, que genera trabajo a miles de personas de manera permanente. Es importante, también, recordar que, durante la pandemia, este valle sostuvo la vida de millones de peruanos y peruanas a través de la producción de la cebolla, ajo, arroz, papa entre otros productos.

Finalmente, la situación de los heridos, criminalizados, detenidos y encarcelados injustamente, así como de los familiares de los fallecidos, en las sucesivas protestas sociales, ha generado la sensación de impunidad, ya que muchos casos no cuentan con ninguna investigación, ni mucho menos sanción a los responsables. Por tanto, pretender revivir un proyecto que tanto dolor ha generado al pueblo del Valle de Tambo, reiteramos, no solo es irresponsable, sino una afrenta a los agricultores y a la población local.

Lima, 26 de setiembre del 2023

Hoy se debatirá en el Congreso de la República los Proyectos de Ley acumulados N°s 2172, 2519, 3621 y 5171, que proponen nuevas condiciones para el acceso al Registro Integral de Formalización Minera (REINFO), así como la ampliación del plazo de inscripción, con la finalidad de impulsar la formalización de la pequeña minería y minería artesanal.

Mediante la propuesta legislativa se estaría modificando, por quinta vez, el proceso de formalización minera que se inició en el 2002 y cuyo plazo ya se encontraba determinado y ampliado hasta el 31 de diciembre del 2024. Por lo que, los operadores mineros podrán seguir operando sin estándares mínimos ambientales ni licencia social. Además, las fiscalías especializadas en materia ambiental se verían limitadas en denunciar el delito de minería ilegal tipificado en el Artículo 307-A del Código Penal, porque, entre otros factores, el acceso al REINFO, tal como se está llevando a cabo, es aprovechado por dicho tipo de minería para catalogarse como en “vías de formalización”.

Desde Red Muqui y su grupo de trabajo de Minería Artesanal y Pequeña Escala (MAPE), rechazamos y denunciamos que se impulsen tales proyectos de ley que, lejos de ordenar un proceso de formalización con plazos establecidos firmes, lo amplia y de esta manera, se facilitan las condiciones para el avance y consolidación de la minería ilegal, colisionando con los derechos humanos y ambientales de las comunidades y pueblos.

Lima, 21 de septiembre del 2023.

El escenario social y político en Arequipa se complica por la pronta llegada de los gremios mineros a esta ciudad, sede oficial de la convención minera Perumin 36, así como la posible presencia de la presidenta Dina Boluarte, responsable de más de 60 muertes registradas durante las movilizaciones pacíficas contra su régimen autoritario.

La razón de las crecientes tensiones política y social obedece a que en el Valle del Tambo, provincia arequipeña de Islay, los gremios sindicales y de agricultores han rechazado en consultas vecinales y populares el proyecto Tía Maria de la compañía minera Southern Perú. Por ello, la elección de Arequipa como ciudad central de esta convención minera y la eventual visita de Dina Boluarte es interpretada como una provocación para las organizaciones sociales, que anunciaron protestas a partir del 25 de este mes, fecha de inicio del Perumin.

En conversación con Red Muqui, la agricultora y exdirigente Marilú Marroquín ha evaluado esta situación no como una coincidencia, sino, por el contrario, una estrategia de Perumin y del gobierno para “dar a entender que habrá más trabajo si es que se autoriza el proyecto Tía María”.

“Es claro que los mineros le están preparando el terreno para que diga si Tía María va o no. Nosotros vamos a marchar. La población ya se ha dado cuenta de la forma en la que actúa el gobierno para encarcelar dirigentes, asesinar y criminalizar la protesta”, expresó.

También el Ejecutivo, a través del ministro de Energía y Minas, Oscar Vera Gargurevich, ha admitido la intención de reactivar el proyecto Tía María, durante una entrevista brindada a un medio nacional en mayo de este año. Para el secretario ejecutivo de Red Muqui, Jaime Borda Pari, es el mismo gobierno que viene azuzando la movilización, más aún con la posible llegada de Dina Boluarte.

“Decir ahora que se va sacar adelante este proyecto es simplemente una provocación y un llamado a la reactivación del conflicto social en el Valle de Tambo. Recordemos que, en todo el proceso de lucha, muchos hermanos han sido asesinados, heridos, estigmatizados, criminalizados y encarcelados por el solo hecho de protestar, como es el caso de los dirigentes Jaime de la Cruz y Jesus Cornejo”, declaró.

De esta manera, el régimen de Dina Boluarte prueba, una vez más, que existe una alianza con los gremios mineros, continúa Borda. “Buscan imponer por la fuerza y la violencia un proyecto minero cuestionado en la región de Arequipa”.

La postura de la hoy presidenta Dina Boluarte fue diferente en campaña, según Marilú Marroquín, quien precisó que Dina Boluarte firmó un acta con la sociedad civil organizada de Arequipa para el retiro inmediato de la empresa Southern Perú de la provincia de Islay y la cancelación definitiva de los proyectos Tía María y La Tapada.

“Pedimos que diga públicamente si Tía María va o no va. Tenemos un documento que ella firmó en campaña. Ahora está cambiando de posición”, puntualizó.

La importancia del Valle del Tambo

El Valle del Tambo tiene una extensión de 15 mil hectáreas agrícolas, es considerada la despensa alimentaria del sur. El principal destino de la producción es Lima (39 %), luego Arequipa (38 %). Los alimentos que produce son cebolla, ajo, arroz, papa, caña de azúcar, entre otros productos. Además, genera empleo permanente para más de 10 mil personas en la zona.

La resistencia al proyecto Tía María, ubicado en el Valle del Tambo, se debe a la importancia de la agricultura en el territorio, donde preexisten dinámicas culturales, sociales y económicas. Allí el proyecto minero pretende explotar minerales de óxidos de cobre a tajo abierto para la producción de cátodos de cobre.

En ese sentido, el secretario ejecutivo de Red Muqui recalcó que se ha mostrado en reiteradas ocasiones de que el proyecto Tía María es inviable técnica y socialmente.

“La empresa minera Southern Perú no ha logrado demostrar que no se contaminarán las aguas del río Tambo, y mucho menos que se garantizará agua para las actividades agrícolas del Valle de Tambo”, finalizó Jaime Borda.

La semana pasada el Relator Especial para los derechos humanos al agua potable y al saneamiento, Pedro Arrojo Agudo, presentó al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en su 54° período de sesiones el informe final de su visita al Perú.

En su recorrido por el país, que se extendió del 1 al 15 de diciembre del año pasado, Pedro Arrojo, economista de formación y experto en gestión de agua, visitó los departamentos de Lima, Ica, Cajamarca, Puno y Loreto. Durante su estadía se reunió con una extensa representación de la sociedad organizada que compartió con él sus preocupaciones y su lucha diaria en defensa de los derechos humanos al agua potable y al saneamiento.

Allí el Relator Especial pudo conocer de primera mano la alarmante vulnerabilidad hídrica del Perú ante el cambio climático, acrecentada por el modelo de desarrollo extractivista imperante, y las consecuencias devastadoras que la contaminación tóxica de las aguas genera sobre la población.

La destrucción de acuíferos, humedales, bofedales y bosques húmedos en cabeceras fluviales a causa de la gran minería, así como las graves afecciones que esta les provoca agrava el impacto sobre la regulación de caudales fluviales que supone la desaparición de los glaciares, lo que dispara la vulnerabilidad de la mayor parte de la población que vive en la franja costera del Pacífico, frente a los crecientes riesgos de sequía y de inundación.

Respecto a la contaminación tóxica, el Relator destaca los datos del propio Ministerio de Salud, según los cuales más de 10 millones de peruanos y peruanas, es decir más del 31 % de la población, sufren riesgo diario de contaminación por metales pesados, metaloides y otros tóxicos, con la demoledora precisión de que el 84 % son niños y niñas.

El relator en su informe también nombra los responsables de tan graves perjuicios para la salud pública, pues destaca que la contaminación procede de explotaciones mineras legales e ilegales activas y de frecuentes vertidos petroleros, pero también de 7.668 pasivos ambientales mineros, y de los 3.231 pasivos del sector de hidrocarburos identificados hasta la fecha. Concluye el relator: “ Estamos, en suma, ante un proceso de envenenamiento sistemático de gran parte de la población, especialmente en comunidades campesinas e indígenas, al tiempo que el cambio climático proyecta un futuro hidrológico sombrío para el país”.

Es especialmente preocupante la situación hidrológica del Perú, ya que más del 97 por ciento de las aguas superficiales y de acuíferos subterráneos discurren por la vertiente del Amazonas hacia el océano atlántico y menos del 2 % del total del agua disponible se genera en la vertiente pacífica, con la paradoja que es en la Región Hidrográfica del Pacífico donde se concentra el 65 % de la población y se produce la mayor actividad económica.

En esta tensa situación hídrica que presenta el país, la acción humana agrava la indefensión frente al cambio climático, constata el informe: “El desarrollo de la minería a cielo abierto en cabeceras fluviales, además de generar graves problemas de contaminación, deseca y amenaza lagunas, humedales y bofedales en las cabeceras, como ocurrió con la laguna de Yanacocha y las nacientes del Río Grande junto a la ciudad de Cajamarca”.

En efecto, en la región de Cajamarca, el Relator Especial visitó las lagunas y manantiales de Alto Perú de los que dependen varias cuencas hidrográficas. Inquietan al enviado de la ONU las concesiones mineras solicitadas en la zona y la falta de medidas legales para proteger estos ecosistemas. Además, recibió información preocupante sobre el proyecto minero Río Blanco, que afectaría a los bosques de neblina, importantes para regular las aguas de Piura, como reconoce la Autoridad Nacional del Agua y denuncian las comunidades campesinas.

Entre las principales recomendaciones que debería abordar el país para alcanzar el derecho humano al agua potable y el saneamiento, destacan las siguientes:

– Transitar a modelos de gobernanza del agua con enfoque ecosistémico y de derechos humanos, que garantice la participación ciudadana y los derechos de los pueblos indígenas.

– Promover laboratorios independientes con capacidad de análisis y seguimiento de los problemas de contaminación de aguas, al servicio de comunidades y organizaciones sociales.

– En contexto de escasez o de competencia entre usos del agua, deben reservarse las fuentes naturales de mayor calidad al abastecimiento humano.

– Activar la Ley 30640 y establecer una moratoria a nuevas concesiones mineras en cabeceras de cuenca, como zonas intangibles en las que no se otorgue ningún derecho de aguas.

– Crear el sistema nacional de información de la vigilancia sanitaria del agua previsto en el Reglamento de la Calidad del Agua para Consumo Humano.

– Implementar mecanismos de reparación para víctimas de contaminación.

– Fortalecer la gestión comunitaria del agua poniendo en valor la agro ganadería y las actividades económicas tradicionales respetando los saberes, las prácticas y la gobernanza comunitaria de los Pueblos Indígenas.

– Acabar con la criminalización de las personas defensoras del agua, por ello el Gobierno debe reconocer el papel de las personas defensoras del agua.

Puede leer el Informe completo del Relator Especial, dando clic AQUÍ

El actual modelo extractivista que, en beneficio económico y social de las élites, rige el país desde la colonia, se profundizó en los años noventa del siglo XX con la dictadura de Fujimori y durante 30 años se ha perfeccionado con los diversos gobiernos que han ido quitando obstáculos a la inversión minera. Lo que observamos ahora es un contexto mucho más complejo, en el cual nos gobierna un régimen autoritario muy cercano a los intereses de los grupos empresariales mineros que controlan especialmente el Ministerio de Energía y Minas.

Es así que los gremios mineros ya vienen influyendo en el Ejecutivo y han retomado su agenda para plantear modificaciones normativas, para acelerar y simplificar procedimientos administrativos, y así poder prescindir de garantías para la protección del ambiente, el agua y los derechos de comunidades campesinas.

Al realizar un recuento de las normas antiderechos promovidas en este período, estas se inician el 30 de mayo de 2023, a través del Decreto Supremo N° 006-2023-MINAM, con el que se suspendió el Procedimiento Único del Proceso de Certificación Ambiental (PUPCA) aprobado mediante Decreto Supremo N° 004-2022-MINAM. El PUPCA era una herramienta del Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles (SENACE), cuya creación fue fruto de un proceso de varios años de evaluación y gestión participativa para integrar la certificación ambiental en un solo ente del Estado, y así poder fomentar la transparencia y el acceso a la información ambiental en los proyectos de inversión. Sin embargo, fue suspendido porque los grupos empresariales no están dispuestos a transparentar su gestión y la información ambiental que manejan. En vez de ser suspendido, el PUPCA debió ser reforzado como instrumento legal, y evidencia la negligencia en la gestión ambiental en el contexto de expansión extractiva y de los conflictos socioambientales en territorios originarios.

Al mes siguiente, el 27 de junio, a través de la Resolución Ministerial N° 256-2023-MINEM/DM, se publica el proyecto de Decreto Supremo que modifica el Reglamento de Protección Ambiental para las Actividades de Exploración Minera, aprobado por Decreto Supremo Nº 042-2017-EM. El objetivo principal de la modificación es insertar artículos a fin de acelerar los procedimientos administrativos para la obtención inmediata del título habilitante de la Autoridad Nacional del Agua (ANA) en el proceso marco de la certificación ambiental de la actividad minera. Red Muqui presentó observaciones a este proyecto de norma, porque lo considera una grave amenaza a las potestades de la ANA frente a la crisis climática, cuyas consecuencias inmediatas y visibles están sufriendo especialmente las comunidades, que deben hacer frente a la escasez hídrica y la merma en la producción agrícola.

Hace poco más de un mes, en tanto, Víctor Góbitz, presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), expuso en El Comercio una serie de propuestas riesgosas para el ambiente y las comunidades, con la supuesta finalidad de “inyectar” confianza a los inversionistas mineros y “reactivar” la economía. Una de las principales ideas de la SNMPE es la fusión del SENACE con otras instituciones ambientales como la Autoridad Nacional del Agua – ANA, el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre – Serfor y el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado – Sernanp, autoridades que emiten opiniones técnicas vinculantes para la puesta en marcha de las certificaciones ambientales de los proyectos de inversión. Ante la alerta y la denuncia de la sociedad civil sobre esta amenazante propuesta de los grupos empresariales, la titular del Ministerio del Ambiente, Albina Ruiz, salió a desmentir que el gobierno estuviese considerando la fusión de los entes mencionados. No obstante, ello no imposibilita que el mismo Ejecutivo pueda proponerlo más adelante a través de una posible delegación de facultades.

Las amenazas para el medio ambiente, el agua y las comunidades continúan, ya que se evidencia una política permanente de intentar flexibilizar los actos administrativos para alinearlos a los intereses privados, dejando de lado, con ello, el deber de prevención y el principio precautorio, ambos anclados en el derecho ambiental. Además, mediante las propuestas normativas previstas, que implican prescindir de procedimientos transparentes y de buen gobierno que garanticen el acceso a los derechos humanos, existe una gran probabilidad que aumenten los conflictos socioambientales. Queda patente así, que los intereses económicos de las empresas, hegemónicos en la sociedad peruana, son los priorizados por las políticas de Estado.

Hace dieciséis años la decisión de las comunidades y población local de los distritos piuranos de Pacaipampa, Ayabaca y El Carmen de la Frontera, provincias de Ayabaca y Huancabamba, respectivamente, marcaron un precedente histórico en la defensa de su territorio, los páramos y bosques de neblina frente a la amenaza del proyecto minero Majaz, ahora llamado Río Blanco.

El 16 de septiembre de 2007, se convocó a la población en una consulta vecinal con un arrasador resultado: el 95 por ciento le dijo NO al ingreso de este proyecto minero de la empresa china Zijin. Si bien sus resultados no son vinculantes desde un punto de vista legal, sí son expresión legítima de los anhelos comunitarios y así ha quedado demostrado con el tiempo.

Desde entonces, cada año se rememora la voluntad popular de la consulta de 2007 y la movilización organizada para que no se repitan los casos de secuestro, tortura, intimidación, criminalización de la protesta social, así como la pérdida de vidas humanas. Muestra de ello, son las muertes de Reemberto Herrera Racho (2004) y Melanio García González (2005), víctimas fatales de la represión policial en marchas pacíficas. A ellos se suma una larga lista de personas heridas.

La importancia de los páramos, bosques de neblina y el agua que sostienen la vida

A pesar de las acciones violentas, ilegales y disolutas contra dirigentes ronderiles, defensores ambientales y organizaciones sociales, que han contado con la complicidad de los gobiernos de turno, la empresa china Río Blanco Copper del consorcio Zijin no ha podido conseguir la licencia social para la exploración minera de cobre y molibdeno a tajo abierto en las nacientes de las cuencas de los ríos Quiróz y Chinchipe, en la zona de páramos y bosques de neblinas, en territorios de las comunidades de Segunda y Cajas; y Yanta. El agua proveniente de estos ecosistemas hídricos aseguran la agricultura, la alimentación, la ganadería, el turismo y la vida de estas comunidades y de toda la población de Piura.

Esta resistencia colectiva, ante la pretensión de imponer el proyecto minero, se ha manifestado a lo largo de los años en encuentros, reuniones y asambleas. Para conmemorar esta fecha histórica, las federaciones de las rondas campesinas y comunidades originarias realizaron dos actividades públicas el fin de semana. Una de ellas se realizó en el distrito de Sapalache, provincia de Huancabamba, y la otra en la comunidad de Yanta, provincia de Ayabaca.

La participación de las rondas campesinas de Piura y Cajamarca, autoridades políticas y población en general fue masiva. El equipo técnico de Red Muqui y sus instituciones miembros, la Diócesis de Chulucanas, REDAD y CEAS acompañaron las actividades conmemorativas.

En ambos encuentros, las comunidades y la población local ratificaron su compromiso de proteger sus páramos y bosques de neblina de toda actividad extractiva, que amenaza con depredar sus aguas y territorios.

Prácticas cuestionables de la empresa

Asimismo, hicieron un recuento de este conflicto socioambiental que inició en el año 2001, luego de la concesión otorgada al proyecto Río Blanco, subsidiaria de la empresa británica Monterrico Metals, por parte del gobierno de Alejandro Toledo. Un año después, la empresa minera ingresa a operar ilegalmente dentro del territorio de las comunidades de Segunda y Cajas, y Yanta, sin la autorización de las asambleas comunales. Provoca tal impacto social y ambiental (en la fase de exploración entre el 2004 y 2008) que tiene que ser remediado por la empresa con la supervisión y vigilancia de las comunidades afectadas.

A la fecha la empresa minera sigue intentando entrar a territorios comunales con el ofrecimiento de puestos de trabajo y la generación de canon minero pese a que la población dijo no a la minería en la referida consulta, realidad que merece ser develada, puesto que la empresa pretende crear una narrativa que altera los hechos, a través de campañas en medios de comunicación.

Los riesgos de la minería al medio ambiente

Pero, ¿cuáles serían los impactos ambientales de Río Blanco en zona de páramos y bosques de neblina?

– Perjudicaría la calidad de aguas superficiales y subterráneas.
– Disminuiría la disponibilidad de agua para consumo humano y actividades agropecuarias.
– Afectaría los ecosistemas naturales y la biodiversidad.

Por lo tanto, la presencia de Río Blanco y de cualquier otro proyecto minero en la zona de páramos y bosques de neblina que son parte de un corredor biológico, que se extiende desde el Parque Nacional Podocarpus en el Ecuador y se prolonga hasta el Santuario Tabaconas Namballe, pone en serio riesgo las aguas superficiales y subterráneas, afectando con ello la calidad y la disponibilidad del esencial líquido para el consumo humano y la economía agraria.

La agricultura familiar es la principal forma de organización de la producción agraria. Entre los principales cultivos aparecen el maíz, trigo, frijol, café, plátano, yuca, entre otros, que a diferencia del cobre tiene un valor inconmensurable, aún más en el marco de la crisis climática que estamos padeciendo.

Por ello, se debe destacar que la agricultura familiar es la base fundamental de la disponibilidad de alimentos, de la economía, el trabajo y de las formas de organización de las comunidades de Ayabaca y Huancabamba. Tampoco se debe olvidar el importante rol de los páramos para surtir de agua a la agricultura piurana.