Listado de la etiqueta: seguridad alimentaria

La crisis sanitaria mundial por la enfermedad del Coronavirus (COVID-19) no solo está causando graves problemas para la salud, sino también está poniendo en grave riesgo la alimentación y el medio amiente de todos los peruanos y peruanas. En especial, los más afectados son los más de 2.2 millones de pequeños productores agropecuarios que tienen una gran responsabilidad de producir alimentos para el país debido a que son excluidos de las políticas públicas, el abandono de los gobiernos de turno y la política de reactivación económica que prioriza el extractivismo en desmedro del medio ambiente.

La actividad agrícola cayó (-1.72% y – 9.52%) en los últimos meses de Junio – Agosto[1] por la pandemia y algunos productos como el café cayo hasta un 10% y, en general, existe el riesgo de perder sus cosechas porque muchos productores se han quedado endeudados. Lo mismo ocurre  con la actividad pecuaria que fue afectada por la pandemia: “los ganaderos han tenido que botar su leche y quesos”, porque las políticas públicas excluyen a los pequeños productores agropecuarios, tal como lo señala el presidente de la Asociación de Ganaderos Lecheros del Perú (Agalep) que han solicitado a Qali Warma para que puedan comprar alimentos directamente a los pequeños productores, pero hay varios candados legales que los impiden o dificultan. El gobierno lejos de atender estas demandas continua debilitando los estándares ambientales (por presión de la CONFIEP para favorecer alas grandes empresas mineras que ya han dejado más de 8,448 pasivos ambientales mineros y en estos tiempos de pandemia la actividad minera continúa trabajando sin control ambiental, con licencia para contaminar las principales fuentes de agua del país

La crisis sanitaria que venimos atravesando se ha convertido ya en una crisis alimentaria y ambiental y requiere la urgente atención del gobierno. Este 16 de octubre,“día mundial de la alimentación” , no hay nada que celebrar porque nos encontramos en medio de una de las peores crisis en la historia del Perú. Una crisis sanitaria que va impactando directamente en la seguridad alimentaria del país y agravando a gran velocidad nuestro medio ambiente.

En estos tiempos de incertidumbre, es de prioridad urgente que el gobierno asuma su responsabilidad y organice un comando de seguridad alimentaria para articular a los diferentes sectores del gobierno y de esta manera atender de inmediato el problema de la crisis alimentaria y ambiental. Además, el Estado debe reconstruir el tejido social para fortalecer a las principales organizaciones sociales (comunidades campesinas y nativas, organizaciones de mujeres, rondas campesinas, organizaciones amazónicas, a los pequeños productores, etc) para evitar que una crisis resulte siendo la puerta para muchas otras que tuvieron que ser evitadas desde antes. La alimentación es un derecho humano y ahora más que nunca es importante reconocer la necesidad de apoyar a nuestros héroes de la alimentación, a los pequeños productores agropecuarios y los trabajadores de todo el sistema alimentario, que garantizan que los alimentos lleguen de la chacra a la mesa, incluso en medio de esta crisis actual de COVID-19. El congreso de la Republica tiene un deber indispensable de elaborar políticas adecuadas para reconocer a los héroes de la alimentación y enfrentar la crisis alimentaria y ambiental del país.

[1] INEI 2020

“La iglesia agradece a todos aquellos que se ocupan de la defensa de la vida y del ambiente (…) está cercana a los campesinos que con amor generoso trabajan duramente la tierra para sacar, a veces en condiciones sumamente difíciles, el sustento para sus familias y aportar a todos, los frutos de la tierra” (DA. 472)

Las instituciones copartes de Misereor, reunidos en Otuzco, La Libertad, los días 07 y 08 de noviembre del 2016 en el encuentro “Soberanía alimentaria y agricultura familiar”, hemos reflexionado sobre la problemática e importancia de la agricultura familiar en el país, como base principal para la soberanía y seguridad alimentaria de nuestras poblaciones.

Y es que el 81% de los productores existentes en el Perú son pequeños agricultores que producen el 70% de los alimentos de la canasta familiar, y éstos son primordialmente agricultores familiares. Sólo el 7% del territorio nacional se dedica a ésta actividad fundamental para la vida, y para ello es necesario otorgar garantías para los territorios de las comunidades y familias campesinas y nativas, las que se ha perdido o debilitado con la normativa y políticas públicas impulsadas para favorecer el acceso a la tierra para la gran inversión nacional y extranjera, especialmente minera y extractiva en general.

Además, el cambio climático que afecta esencialmente a nuestras zonas rurales, hace prever que los recursos hídricos serán especialmente afectados respecto a su cantidad. Por ello es necesario incidir en la gestión integrada del agua, con especial atención a la protección de las cabeceras de cuenca y los ecosistemas frágiles generadores del recurso, y su manejo sostenible.

Asimismo, el otro problema es el de la calidad del agua que afecta fundamentalmente la salud de las personas y la seguridad alimentaria, ya que impacta en la producción y comercialización de alimentos, siendo los más perjudicados con ello, los pequeños agricultores y agricultores familiares, que no cuentan con apoyo real y efectivo del Estado a nivel local, regional y nacional.

La historia nos demuestra que el Perú es un país agrario, y es necesario aprovechar nuestros recursos naturales de manera más adecuada y sostenible, rechazando los transgénicos, impulsando la agricultura ecológica, favoreciendo el acceso a nuevos mercados evitando con ello los intermediarios y monopolios de hecho, revalorando los saberes ancestrales y complementándolos con la tecnología e innovación, entre otras acciones que favorezcan dicha actividad.

Para todo ello es necesario involucrar en dicha tarea al Estado, poblaciones, comunidades y sociedad civil, en una tarea conjunta y coordinada.

Finalmente, mostramos nuestra preocupación por la situación de conflictividad socio ambiental que se mantiene con el nuevo gobierno, especialmente respecto de la actividad minera y de hidrocarburos; y que recientemente ha generado dos nuevos fallecidos en la provincia cercana de Pataz-La Libertad, por las protestas en contra de la contaminación generada por la empresa minera Consorcio Minero Horizonte, y que se suma a lo acontecido en la zona del proyecto minero Las Bambas, donde podemos comprobar que el poder económico mediante convenios maneja las decisiones del Estado, lo que es un serio riesgo para las poblaciones afectadas y del entorno.

“Firmamos el presente con esperanza de un mundo mejor”

1. RED MUQUI – LIMA

2. AMAS – LA LIBERTAD

3. CEDEP – ANCASH

4. CENTRO LOYOLA – AYACUCHO

5. REDES – HUANCAYO

6. CEPROM – HUANCAYO

7. GRUFIDES – CAJAMARCA

8. DIOCESIS DE CHULUCANAS – PIURA

9. REDAD – PIURA

10. VIMA – JAEN

11. PASSDIH – HUANCAYO